La verdad, la verdad, la verdad, estoy muy enojado con Britney Spears. Soy su fan desde que yo tenía 14 años, desde que ella saltó a la escena pública con ...Baby One More Time y la he seguido en estos 12 años con mucha pasión y fe. Soy el primero en defender su trabajo con argumentos sólidos y enaltecer sus logros, sin embargo, en esta ocasión es la misma Britney quien me deja sin armas, sin palabras para defender los dos errores que cometió en los Premios Billboard 2011, que se realizaron el domingo en Las Vegas, Nevada.
¿Qué fue lo que sucedió? Britney desaprovechó al máximo dos momentos que si bien no terminarían siendo gloriosos harían eco en esta semana y en la historia de presentaciones en vivo de los Billboard, que honra a los artistas con altas ventas en sus diversas listas de géneros.
La primera de ellas fue en la apertura de la ceremonia. Una sensual y amaestrada Rihanna calentó suficiente el escenario para dar la bienvenida a Britney Spears e interpretar juntas lo que restaba del remix que grabaron del tema S&M. ¿Y qué fue lo que pasó? ¡Nada! ¡Nada pasó! Después de escuchar a Rihanna cantar en vivo, Britney decide entrar a escena haciendo playback, sin saber qué pie mover, a qué parte del escenario dirigirse, si sonreír o mejor bajarse. Y lo peor, al final de la presentación Britney deja sola a Rihanna en la tarima y fue la misma Rihanna quien la llama de vuelta para plantarle un beso en la mejilla.
En la segunda intervención musical de Britney en los Billboard nada mejoró. Nicki Minaj compartió la parte final de su actuación con Spears y ésta entró a escena sin fuerza, con miedo a caerse, haciendo playback y con una risa falsa en su rostro. Yo no soy seguidor de la música de la rapera Minaj, pero lo estaba haciendo muy bien, y de ser la protagonista de su presentación terminó como la escolta de Britney. Nada bien.
Todo esto es una lástima porque el álbum reciente de Britney es muy bueno, realmente vale la pena escucharlo, disfrutarlo y bailarlo. Lo peor es que ni la misma Britney Spears pueda bailar sus propias canciones porque no tiene ganas o se siente pesada corporalmente. Ella debería ser la primera en demostrar que sus canciones se pueden bailar, se pueden disfrutar y que es un deber tocarlas en una fiesta o en el antro. ¿Y qué es lo que ocurre? Vemos a una Britney sin fuerza, sin ganas, sin gracia: una mujer fatal, pero muy fatal.
Inolvidable
Lo mejor de esa noche fue Beyoncé. La cantante presentó en vivo su nuevo tema Run The World (Girls) y se ganó la reverencia del público. Beyoncé ofreció una actuación interactiva, cantó y bailó como nos tiene acostumbrados y, obviamente, enalteció una vez más el poder de la mujer actual. Antes de su presentación importantes personalidades de la música, como Bono, Lady GaGa, Barbra Streisand y Stevie Wonder, y la política, la primera dama de EU Michelle Obama, rindieron homenaje a la cantante con palabras de amor y respeto y fue premiada como la Artista del Milenio, galardón que le fue entregado por su madre, la diseñadora Tina Knowles.